El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, acogerá este jueves el arranque de la Cumbre por la Democracia, un evento virtual con el que busca fortalecer la democracia frente al autoritarismo y promover los derechos humanos.
“Los Gobiernos autoritarios están activamente trabajando para sembrar división y desconfianza en las democracias. La crisis que encaramos es real”, señaló Antony Blinken, secretario de Estado de Estados Unidos, en un artículo de opinión publicado este miércoles en el diario USA Today.
Blinken destacó que la cumbre, uno de cuyos ejes será el combate a la corrupción, reúne a un amplio “espectro” de países, que incluye “a democracias sólidas con otras que han retrocedido”.
En la lista de invitados figuran países de todo el mundo que Estados Unidos considera democracias, y que van desde naciones europeas como España y Francia, pasando por Israel, Pakistán y Nigeria. La cita, sin embargo, ha generado más revuelo por las ausencias que por las presencias, especialmente China y Rusia, dos grandes adversarios globales de Estados Unidos.
En Latinoamérica están invitados Argentina, Brasil, Colombia, Chile, Costa Rica, México, Ecuador, República Dominicana, Perú, Paraguay y Uruguay, entre otros. Sobre la manera en que los compromisos alcanzados durante el encuentro serán materializados, el Gobierno estadounidense apuntó que invitará el próximo año a la cumbre presencial a aquellos que cumplan con las promesas adquiridas